Me levanto a las 6 de la mañana, Aire fresco que hay que aprovechar. Tengo que encontrar la oficina de correos pero a esta hora está cerrada. El desayuno a base de arroz y plátanos y manzana. Por donde pasa el Ganges en Haridwar se llama Harki Puari (como una piscina ) tienen sus gradas donde entrar sin riesgo en la corriente. Todo el mundo se baña para obtener la purificación y evidentemente antes de coger el tren a Rishikesh no voy a desaprovecharlo. Dejo mi mochila en la recepción del hotel y voy al rio. La verdad, baja bastante sucio pero son sedimentos de arena, o me baño aquí o nada porque en Benarés donde queman a sus muertosy los hechan al rio ni loco. Entrar y el agua helada no deja pensar en nada más que en salir rápido, pero una vez seco y vestido me entra una sensación de paz.
La mochila me pesa demasiado tendré que aligerar. Cojo un tren hacia Rishikesh (Ciudad de los Maestros) Rishi significa en Sánscrito eso Maestro. Gurús y Maestros en India hay millones, pero hombres sabios contados con la palma de la mano. Las orillas del Ganges se extienden 30km al norte por cultivos fértiles que enriquecen la zona. El gran valle del Ganges es increíble, en la carretera por donde pasaba el bus ayer no habían 100 metros seguidos sin un tenderete con gente vendiendo algún trasto, lo venden todo. Cuando me he dado cuenta que era imposible encontrar a la famiia del doctor para despedirme me he largado. El trayecto ha durado una hora, en el tren me pongo a charlar con un muchacho y me comenta que Seguir leyendo ‘Viaje al interior de India (III)’
ACABAN DE ESCRIBIR